OSURI SURGERY

Face Lift

El lavado de cara es un procedimiento estético quirúrgico destinado a rejuvenecer la apariencia facial, abordando la flacidez o los pliegues de la piel en áreas como los pómulos y la línea de la mandíbula, así como otros cambios relacionados con la edad en la forma facial.

Durante el procedimiento, se realiza una incisión en la piel de cada lado de la cara para acceder a los tejidos subyacentes. Se realizan modificaciones quirúrgicas en estos tejidos para mejorar los contornos faciales y lograr una apariencia más juvenil. Antes de cerrar la incisión, se elimina el exceso de piel.

¿Por qué realizarse un Elevador Facial?

A medida que uno envejece, los cambios naturales asociados con la edad alteran la apariencia y la estructura facial. La piel tiende a volverse menos firme y elástica, con redistribución de depósitos de grasa que resultan en áreas de flacidez y otros más prominentes. Entre los efectos del envejecimiento facial que pueden ser abordados mediante un estiramiento facial se encuentran:

  • La caída de los pómulos, que afecta la definición y la firmeza de la parte superior de la cara.
  • El exceso de piel en la mandíbula inferior y las mejillas, lo que puede conducir a la pérdida de contorno facial.
  • La profundización de los pliegues faciales, como el surco nasolabial que se extiende desde la nariz hasta la comisura de los labios.
  • La piel flácida y la acumulación de grasa en el cuello, particularmente tratable si se incluye un levantamiento de cuello como parte del procedimiento.

Es fundamental comprender que un estiramiento facial no resuelve todas las preocupaciones relacionadas con el envejecimiento facial. No aborda eficazmente problemas como arrugas superficiales, daño solar, pliegues alrededor de la nariz y el labio superior, o cambios en la pigmentación de la piel.

Riesgos

Un lavado de cara puede llevar consigo riesgos y complicaciones, aunque la mayoría pueden manejarse con atención médica adecuada. Las complicaciones permanentes son poco frecuentes pero pueden alterar significativamente la apariencia. Entre los riesgos se incluyen:

  • Hematoma: Acumulación de sangre bajo la piel, que puede causar hinchazón y presión. Se trata quirúrgicamente para prevenir daños.
  • Cicatrices: Las incisiones de estiramiento facial dejan cicatrices permanentes, aunque generalmente se esconden bien. Pueden necesitar tratamiento para mejorar su apariencia.
  • Lesión nerviosa: Puede causar parálisis temporal o pérdida de sensibilidad en áreas faciales. Las cirugías correctivas pueden ser necesarias para mejorar estos problemas.
  • Pérdida de cabello: Puede ocurrir cerca de las incisiones, siendo temporal o permanente. La pérdida permanente puede tratarse con trasplante capilar.
  • Pérdida de piel: Raramente, el flujo sanguíneo puede verse comprometido, resultando en pérdida de piel. Se trata con medicamentos y cuidados adecuados.

Además, como cualquier cirugía mayor, hay riesgo de sangrado, infección y reacciones a la anestesia. Factores como medicamentos anticoagulantes, enfermedades como diabetes o hipertensión, y el tabaquismo pueden aumentar estos riesgos. También, fluctuaciones de peso previas pueden afectar los resultados del procedimiento.

Preparación

Antes de someterse a una ritidectomía facial, es crucial tener una consulta inicial con un cirujano plástico. Durante esta consulta, se abordarán varios aspectos, que incluyen:

  • Historial médico y examen físico: Se revisarán sus antecedentes médicos, incluyendo cirugías anteriores, problemas de salud actuales, historial de tabaquismo y consumo de alcohol o drogas. Además, se realizará un examen físico para evaluar su estado de salud general y su idoneidad para la cirugía.
  • Revisión de medicamentos: Deberá proporcionar una lista detallada de todos los medicamentos que está tomando, incluyendo recetados, de venta libre, suplementos herbales y vitaminas.
  • Examen facial: El cirujano plástico tomará fotografías de su rostro desde diferentes ángulos y evaluará la estructura ósea, la distribución de grasa y la calidad de la piel para determinar el enfoque adecuado para la ritidectomía.
  • Expectativas: Se discutirán sus expectativas con respecto a los resultados de la cirugía. El cirujano le explicará qué puede esperar de la ritidectomía y qué aspectos no se pueden corregir con este procedimiento.

Antes de la cirugía, se le darán instrucciones específicas, que incluyen:

  1. Seguir las instrucciones médicas: Deberá seguir las indicaciones sobre la suspensión de ciertos medicamentos, especialmente aquellos que puedan afectar la coagulación de la sangre.
  2. Higiene personal: Es probable que se le pida que lave su cara y cabello con un jabón desinfectante antes de la cirugía.
  3. Ayuno: Se le pedirá que no coma nada después de la medianoche anterior a la cirugía, aunque podrá beber agua y tomar medicamentos permitidos por su cirujano.
  4. Planificación de la recuperación: Si la cirugía se realiza como un procedimiento ambulatorio, es importante organizar la ayuda necesaria para el transporte a casa y la asistencia durante la primera noche después de la cirugía.

¿Qué puedes esperar?

Antes del procedimiento

Se puede realizar un lavado de cara en un hospital o en un centro quirúrgico ambulatorio. A veces, el procedimiento se realiza con sedación y anestesia local, que adormece solo una parte de su cuerpo. En otros casos, se recomienda la anestesia general, lo que lo deja inconsciente.

Durante el procedimiento

En términos generales, la ritidectomía facial implica levantar la piel y tensar los tejidos y músculos subyacentes, mientras que la grasa en la cara y el cuello puede ser remodelada, eliminada o redistribuida. La piel facial se reposiciona sobre los nuevos contornos faciales, eliminando el exceso de piel y cerrando la herida o utilizando cinta adhesiva para el cierre.

Las incisiones realizadas durante el procedimiento varían según las técnicas utilizadas y las preferencias del paciente. Algunas opciones incluyen:

  • Una incisión tradicional de ritidectomía facial que comienza en las sienes, sigue la línea del cabello hacia abajo, rodea la parte frontal de las orejas y termina detrás de ellas en la parte inferior del cuero cabelludo. También puede haber una incisión debajo de la barbilla para tratar el cuello.
  • Una incisión limitada, más corta, que comienza en la línea del cabello justo encima de la oreja y continúa alrededor de la parte frontal de la oreja, pero no llega hasta la parte inferior del cuero cabelludo.
  • La incisión del levantamiento del cuello que empieza frente al lóbulo de la oreja y continúa alrededor de la oreja hasta la parte inferior del cuero cabelludo. También se realiza una pequeña incisión debajo de la barbilla.

La duración típica de una ritidectomía facial es de dos a cuatro horas, pero puede ser más prolongada si se realizan otros procedimientos cosméticos simultáneamente.

Después del procedimiento

Después de someterse a un estiramiento facial, es posible experimentar los siguientes síntomas:

  • Dolor de leve a moderado
  • Descarga de las incisiones
  • Hinchazón
  • Hematomas
  • Entumecimiento

Es importante comunicarse de inmediato con su médico si experimenta alguno de los siguientes síntomas:

  • Dolor intenso en un lado de la cara o el cuello dentro de las 24 horas posteriores a la cirugía.
  • Falta de aliento
  • Dolor en el pecho
  • Latidos cardíacos irregulares

Las incisiones probablemente estarán cubiertas con vendajes que aplican una suave presión para reducir la hinchazón y los hematomas. También puede colocarse un pequeño tubo debajo de la piel, detrás de una o ambas orejas, para drenar cualquier exceso de sangre o líquido.

Durante los primeros días después de la cirugía, se recomienda:

  • Descansar con la cabeza elevada.
  • Tomar analgésicos según las indicaciones del médico.
  • Aplicar compresas frías en la cara para aliviar el dolor y reducir la hinchazón.

Consultas de seguimiento

Se programarán varias citas de seguimiento durante los dos meses posteriores a su cirugía. Durante estas consultas, se llevarán a cabo las siguientes acciones:

  • El día después de la cirugía, es probable que su cirujano retire el tubo de drenaje, aplique ungüento antibiótico en las incisiones y coloque nuevos vendajes en su rostro.
  • Pasados dos o tres años desde su estiramiento facial, es posible que pueda dejar de usar vendajes y comenzar a utilizar una banda elástica.
  • Alrededor de una semana después de la cirugía, el médico retirará los puntos y examinará la herida.
  • Se programarán citas adicionales para hacer un seguimiento de su recuperación y evaluar su progreso.

Cuidado personal

Durante las primeras tres semanas después de la cirugía, el autocuidado en el hogar es crucial para facilitar la recuperación y reducir el riesgo de complicaciones. Aquí hay algunas pautas importantes a seguir:

  • Siga cuidadosamente las instrucciones de cuidado de heridas proporcionadas por su cirujano y evite retirar las costras que se formen en la herida.
  • Siga las indicaciones sobre cuándo puede comenzar a usar champú y jabones, así como qué tipo de productos usar.
  • Opte por prendas que se abrochen en el frente en lugar de aquellas que se coloquen sobre la cabeza para evitar cualquier tensión innecesaria sobre las incisiones.
  • Evite ejercer presión excesiva o movimientos bruscos en o alrededor de las incisiones y absténgase de usar maquillaje durante este período.
  • Evite la práctica de actividades aeróbicas vigorosas o deportes que puedan comprometer la recuperación.
  • Mantenga la incisión protegida del sol directo durante al menos tres semanas y luego utilice protector solar con un SPF de 30 o más al exponerse al sol.
  • Evite someterse a tratamientos de permanente, así como a tinturas o decoloraciones capilares durante este período de recuperación.

Seis semanas después del estiramiento facial, podrá peinarse para ocultar cualquier signo de la incisión. Es posible que desee considerar posponer la asistencia a eventos sociales importantes durante un par de meses hasta que se sienta completamente recuperado y en forma nuevamente.

Resultados

Un estiramiento facial puede darle a su cara y cuello una apariencia más juvenil. Los resultados de un lavado de cara no son permanentes. Con la edad, la piel facial puede comenzar a ceder nuevamente. En general, un lavado de cara puede durar 10 años.